Scott ya era una de mis marcas preferidas en ciclismo, pero además poco a poco va engrosando su catálogo de material para running y trail cada vez con mayores accesorios y productos de alta calidad. Lo último en llegar es esta mochila-chaleco, de la línea RC, la de la búsqueda del rendimiento de la marca, muy ligera, cómoda, y que pese a su capacidad de porteo de hasta 4L no te restará ni un segundo en tus competiciones o entrenamientos más rápidos por la montaña.
Este chaleco es una buena transformación de las tradicionales mochilas de Trail, ofreciendo con lo mínimo el máximo de capacidades. Personalmente pienso que estos chalecos son totalmente necesarios para aquellas carreras o entrenamientos en los que una mochila resulta demasiado, y una riñonera demasiado poco, o bien cuando no te resulta cómodo llevar ninguno de esos dos accesorios.
La hemos utilizado en competición, donde existe un avituallamiento frecuente y por tanto es ideal llevar botes delanteros, y en aquellos entrenamientos por la montaña donde necesitábamos guardar algo de material: cortavientos, bastones y comida, pero por el ritmo una mochila se vuelve incómoda.
Este chaleco es muy cómodo, es de un textil muy elástico, totalmente transpirable y confortable, con la malla P.Air Honey Nude, y se acopla perfectamente al cuerpo. No dispone de acolchado, pero no es necesario, ya que la sensación es como la de llevar una camiseta más que una mochila. El ajuste es excelente, en parte por la elasticidad de la tela, y en parte por las 5 posibles posiciones en cada lado, de enganche central delantero que ofrece, lo que hace que seas como seas, este chaleco lo llevarás bien sujeto mientras corres, sin oscilaciones, y sin crear fricciones en axilas, espalda o cuello, lugar muy proclive a rozarse con otras mochilas.
Es un chaleco que por su fenomenal ajuste podremos llevar independientemente del ritmo al que vayan nuestras piernas. Incluso con carga de agua la mochila no bambolea ni roza.
Aunque la hemos probado fundamentalmente en invierno, por la tela con la que está confeccionada en la espalda la intuimos muy transpirable, y por tanto perfecta también para tiempo caluroso. Además y gracias a la confortabilidad la podemos llevar sin problemas con camisetas de tirantes (tengo la sensación de que incluso sin camiseta).
La ergonomía no se queda ahí, sino que en el diseño de los bolsillos se ha tenido en cuenta hasta el último detalle, algo que me ha permitido -por primera vez- tener acceso a la carga en marcha. En efecto, para mi brazo derecho (sin movilidad completa por una lesión en el hombro) ha sido genial poder disponer de un bolsillo central relativamente amplio, diseñado en diagonal, que facilita enormemente el acceso a la carga en marcha sin parar de correr. Hay que tener cuidado si se ponen cosas que se puedan mover, ya que este beneficio, el corte diagonal, puede provocar que algo se caiga, aunque al ser de un tejido elástico queda bien cerrado. Además va aislado de la espalda, así que ahí podemos cargar cosas que no queramos que se mojen, no así en el bolsillo principal trasero, que se cierra con cremallera superior. En ese espacio es mejor optar por meter carga a la que no queramos acceder en marcha -a mi me resulta imposible hacerlo- y que no nos importe que se mojen, ya que el tejido en contacto con la espalda es totalmente transpirable y traspasa la humedad.
Una cosa relevante y que me ha sorprendido es que el bolsillo central principal no es compatible con la introducción de una bolsa de hidratación, porque no hay manera de sacar la boquilla por ningún asa de la mochila, algo entendible ya que el concepto del chaleco es muy claro y definido: racing.
Por delante y para completar la capacidad de carga nos encontramos con los dos bolsillos principales que albergan los botes hydrapak de 500ml, ajustados mediante elástico y tanqueta para evitar que ni aun cuando los llevamos llenos de agua se puedan salir ni bambolear al correr. Son botes blandos, muy útiles, pues solo ocupan volumen cuando están llenos, pudiéndose plegar cuando están vacíos. El caudal de bebida es más que suficiente y no hemos tenido dificultad para hidratarnos en carrera. La facilidad de llenado ha sido correcta. De hecho, en los avituallamientos de las carreras donde a veces no damos pie con bola con las prisas hemos podido rellenar con facilidad.
Para complementar los bolsillos, debajo de cada bote de hidratación, presenta un bolsillo que cierra con cremallera: el derecho, donde caben geles o comida, y el izquierdo, algo menos profundo, pero super útil para guardar cosas que no vayamos a usar corriendo, como las llaves de casa o el DNI.
Este nivel general de compartimentación del chaleco me ha encantado. Hemos podido distribuir con sentido toda la carga, bien clasificada, para que en competición no se nos cayera nada y encontráramos fácil lo que buscamos, algo importante cuando se va con la adrenalina a mil por hora.
Un detalle importante: el minimalismo en los diseños no debe ir reñido con la seguridad. Por eso incorpora un silbato, muy recomendable y obligatorio en la mayoría de las carreras, es muy ligero y pequeño, pero de potencia más que suficiente. Otro detalle es que también se puede portear bastones en diagonal gracias a los cordones elásticos que incorpora.
El chaleco, aunque ligero, ha aguantado muy bien durante todo el test. Es muy resistente y da la sensación de que se podrá usar durante mucho tiempo sin sufrir enganchones y roturas.
Conclusiones
Chaleco de competición, muy ligero, transpirable, y confortable, totalmente ergonómico gracias al textil elástico, que hacen que parezca una camiseta más que una mochila, con una capacidad de carga más que aceptable, y una compartimentación perfecta.
LO :
- Ligereza, y transpirabilidad
- Ajuste del chaleco
- Acceso y compartimentación
LO-:
- Posibilidad de incorporar bolsa de hidratación
Características
▪ Peso: 245 gramos (165gr sin los botes)
▪ Capacidad: 4 litros 2 botes de 500ml
▪ Uso: competición
