comitium

7 errores que sigues cometiendo al entrenar

Si no calientas bien y exiges el máximo a tus músculos desde el primer minuto, te romperás…

Redacción Trail Run. Foto: Mikael Helsing.

7 errores que sigues cometiendo al entrenar
7 errores que sigues cometiendo al entrenar

1. No tomarte ni un día de descanso. Y realmente es imprescindible, porque el cuerpo necesita asimilar la carga y nuestro cerebro desconectar del deporte. Si no descansas nunca, pronto estarás sobre-entrenándote y todo irá a peor.

2. Pensar que entrenar es solo correr. No, y aunque sea lo que más nos gusta, hay otros aspectos importantes para mejorar las cualidades físicas básicas: fuerza, flexibilidad, velocidad…

3. Plantearse objetivos difíciles demasiado rápido. Llevas cinco meses corriendo en montaña y ya quieres hacer un ultra. Gran error. No quemes etapas antes de tiempo y disfruta de esa progresión del kilometraje en tus desafíos.

4. Hacer siempre la misma sesión de entrenamiento. Correr siempre por el mismo recorrido y al mismo ritmo nos va a servir de poco. Varía el circuito, el desnivel, los ritmos, todo… No acomodes a tu cuerpo a lo que ya conoce o serán sesiones de entrenamiento desaprovechadas.

5. No calentar. A veces porque vamos con el tiempo justo y otras porque desconocemos sus enormes beneficios. El caso es que debemos hacer un calentamiento previo a la sesión propiamente dicha porque nuestros músculos necesitan esos minutos de adaptación antes de exigirles más. Mejor recortar diez minutos del rodaje y cedérselos al calentamiento.

6. Pensar que los entrenadores son solo para atletas de elite. Cualquier corredor mejoraría con un entrenador que le guiara. Contratar uno no significa “ir de flipado", ni creerse más que nadie, simplemente es el método más eficiente de progresar en nuestro deporte y disfrutarlo a pleno rendimiento.

7. No priorizar un reconocimiento médico. Tenemos tres pares de zapatillas para correr y pensamos en el cuarto antes de invertir ese dinero en una prueba de esfuerzo. Está en juego nuestra salud, y ahí nunca hay que recortar. Si tienes un presupuesto ajustado, prioriza un reconocimiento médico a unas zapatillas.