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Miguel Heras: “Nunca he tenido demasiada suerte en UTMB”

Entrevistamos al bejarano antes de viajar a Chamonix

Dani Sanabria. Foto: JCD (archivo Ultra Pirineu 2016).

Miguel Heras: “Nunca he tenido demasiada suerte en UTMB”
Miguel Heras: “Nunca he tenido demasiada suerte en UTMB”

El tercero de los hermanos Heras está firmando una de las mejores temporadas de su vida. De carácter tranquilo y humilde, Miguel regresa al Mont-Blanc a la sombra de los grandes atletas internacionales. Pocos cuentan con él, pero como diríaLuis Aragonés, el bejarano tiene el culo pelao de hacer –y mayormente ganar– carreras de ultratrail. Colecciona victorias. Y aunque en Chamonix nunca pudo escalar hasta el peldaño más alto del podio, en su palmarés no deja de lucir una merecida medalla de plata en el 2013. Hoy viajará a los Alpes y el jueves hará el último entrenamiento sobre el terreno. Llega en muy buen momento.

Miguel, se te ve fuerte. Has cuajado un verano de matrícula de honor con victorias claras en el Ultra Sierra Nevada y Desafío Somiedo. Y ahora al UTMB.

Bueno, ya veremos qué tal va en Chamonix. Sí es cierto que llevo un buen verano pero lo del Mont Blanc es otra cosa, a ver cómo transcurre la carrera y si hemos hecho los deberes. En realidad, esas pruebas de las que me hablas fueron en cierto modo parte de la preparación para el UTMB y Ultra Pirineu.

El año pasado tuviste que abandonar después de Courmayeur. ¿Eso multiplica las ganas de competir en esta edición?

La verdad es que en esta carrera nunca he tenido demasiada suerte, así que voy con la mentalidad de, sobre todo, llegar a la línea de meta. Y ya según vayan sucediéndose los acontecimientos en carrera, veré si puedo apretar para llegar más adelante, pero el objetivo principal es llegar.

Entonces, ¿no vas con ninguna expectativa concreta?

No, para nada, no he pensado en posiciones. Además, no puedes depender de la carrera de los demás para estar contento contigo mismo o no. Si hago una buena carrera, no cometo errores y me encuentro bien, estaré contento, llegue en la posición que llegue. Si es cerca de la cabeza, mejor, pero si es más atrás porque tengo menos nivel que ellos, también bien.

Sois muchos los corredores de elite que me habéis dicho últimamente que en este tipo de carreras vais decidiendo casi todo sobre la marcha.

Sí, yo siempre lo hago. Me fijo en cómo está marchando la carrera en cada momento y analizo varios parámetros que uno tiene que tener en cuenta al hacer 170 kilómetros. Hasta que uno no está dentro no puede saber detalles como por ejemplo a qué distancia tienes la cabeza de carrera, o cuánto tiempo le sacas a tus perseguidores, y por supuesto cómo estás tú mismo. El clima también influye. Y todo este compendio de circunstancias es lo que va determinando cómo va tu carrera.

Todo el mundo está hablando de los americanos. Junto a Kilian, parece que se han convertido en el gran atractivo de esta edición.

Los americanos siempre dan espectáculo. Son de la escuela del todo o nada. Van siempre a muerte, pero nosotros los europeos sabemos que la clave de estas carreras es cómo se acaba, no cómo se empieza. Su presencia está claro que le da un punto picante a la prueba, hacen que la carrera coja ritmo, pero eso va a beneficiar a quien mejor esté de piernas en la parte final. Y lógicamente malo para el que se ceba en exceso al principio. La combinación entre europeos y americanos creo que va a ser divertida.

Sí, sin duda. Y ver cómo reaccionan los europeos si los americanos empiezan a romper la carrera…

Eso va a ser clave. Nosotros conocemos mejor los tiempos de paso por cada punto, tenemos más experiencia en los caminos de los Alpes, hemos corrido más veces que ellos en Europa… Pero si los americanos salen a saco y ganan la carrera, les damos la enhorabuena y punto, aunque veo ciertamente complicado llevar esos ritmos durante 170 kilómetros. También hay un grupo de cuatro o cinco europeos con mucha calidad y muy rápidos.

Por ejemplo Kilian. ¿Le ves ganando fácil, sufriendo, o crees que esta vez se le puede escapar la victoria?

Sí, le veo favorito, pero sufrir va a sufrir seguro. También para él son 170 kilómetros y va a llevar al lado a un buen número de corredores rapidísimos. Por lógica y palmarés, es el favorito, pero en un ultra tan largo hay muchos condicionantes y factores externos. Si no pasa nada, seguramente gane, pero yo no subestimaría nada a muchos corredores que van y de los que no se habla tanto. Vuelven todos los ganadores de los últimos años e incluso hay varios atletas que no están saliendo en la lista de favoritos y que tienen opciones.

Miguel, en tu currículum encontramos puñados de carreras de ultra-trail en distintos rincones del mundo. ¿Recuerdas un cartel con tantísimo nivel como este de UTMB 2017?

La verdad es que no. Y reitero, hay más de una docena de atletas que a lo mejor otros años estaban entre los favoritos pero esta vez no lo están por todos los cracks nuevos que hay. Yo a esos corredores les tendría muy en cuenta.

Y para terminar, una curiosidad que tengo. Un tío como tú, que ha dado la vuelta al mundo corriendo ultras de todo tipo, ¿todavía tiene ciertos nervios ante la magnitud del UTMB?

Nervioso no es la palabra, pero sí tienes una presión diferente a las demás carreras. En mi caso siento una especie de ansiedad que hace que lo único que quieras es empezar cuanto antes. Pero sobre todo son los instantes previos a la salida, luego ya cuando empiezan las cuestas y los kilómetros te olvidas de esa presión extra. Pero sí, reconozco que existe esa ansiedad que no tienes en otras carreras.

Miguel, te deseamos mucha suerte y que disfrutes al máximo en el Mont-Blanc.

¡Muchas gracias a vosotros!