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Riaño Trail Run cierra su edición más exitosa en el Gilbo

El ‘Cervino leonés’ fue testigo del paso de 400 participantes en una jornada que coronó a Ionel Cristian Manole y Aleksandra Sadlo como vencedores absolutos del evento

Una corredora en la última etapa de Riaño Trail Run ©crédito BlackCoffeeStudio  Terraincognita Sport
Una corredora en la última etapa de Riaño Trail Run ©crédito BlackCoffeeStudio Terraincognita Sport

A las 9:00 h desde la localidad de Salamón, se daba la salida a la última jornada de la Riaño Trail Run con un recorrido de 22 kilómetros en los que se acumulaba un desnivel positivo de 1.400 metros.

El trazado de esta tercera etapa proponía un vertiginoso ascenso hasta la cumbre del Gilbo, otra montaña de contornos afilados e imponente cresta que le otorga una belleza única. El Gilbo es inconfundible, conocido como el ‘Cervino leonés’ por su similitud con la famosa montaña de los Alpes. Los corredores acceden a él a través del pueblo de Horcadas. Por esta vertiente ascendieron hasta tocar cima y descender por el lado opuesto para completar un trazado que finaliza, esta vez sí, a los pies de la monumental iglesia románica de Riaño.

Junto a los participantes de la modalidad 3xTrail y 2xTrail corrieron en esta ocasión los inscritos a la prueba 1xTrail. Nico Mateos, con un tiempo de 2:33:18, y Aiala Urbegain, con 3:36:36, se adjudicaron la victoria en esta modalidad, mientras que en la modalidad 2xTrail (sábado y domingo) los vencedores fueron Ángel de la Encarnación y Zelia Cuevas, ambos corredores del club Todo Vertical, con unos cronos totales de 6:01:26 y 6:48:30. 

En la modalidad reina, 3xTrail, no hubo sorpresas y los favoritos se impusieron también en la tercera etapa. Cristian Manole cerraba un fin de semana impecable venciendo con autoridad con un crono de 2:23:03 (total: 9:59:28) y Aleksandra Sadlo también lograba un merecido ‘triplete’ gracias a un tiempo de 3:20:18 (total: 13:52:56).

Hasta primera hora de la tarde continuaron llegando corredores a la línea de meta en lo que fue la fiesta final de Riaño Trail Run. Un día para recordar. El pueblo, volcado con el evento, se echó a las calles para unirse al ambiente. Música, bailes, fotografías, besos, abrazos y una enorme paella para despedirse hasta la próxima edición.

Riaño Trail Run, mucho más que una carrera

Tras cinco ediciones celebradas, Riaño Trail Run se consolida como una de las carreras más técnicas, bellas y exigentes del calendario nacional. Sus interminables desniveles, el terreno quebradizo en las cotas altas y las inigualables estampas que regala a lo largo de sus tres etapas la convierten en uno de los retos más deseados por los corredores de montaña nacionales y extranjeros. Y, desde este año, también por las chicas. Y es que hasta un 20% del total de los participantes fueron mujeres, una cifra para presumir.

El Riaño Camp, ubicado en el campo de fútbol de la localidad, ha servido de epicentro al evento. Allí han pernoctado los corredores en las tiendas de campaña, han desayunado, comido y cenado, han bailado con la música que amenizaba los atardeceres y han forjado lazos que, a buen seguro, continuarán en las ediciones venideras. Porque si algo tiene Riaño Trail Run es que en todos sus participantes deja un mismo sabor de boca: el de querer volver a disfrutar de la experiencia.

Más información en www.rianotrail.run