Mientras en Europa las miradas se dirigían a Lavaredo y al Mont-Blanc, al otro lado del Atlántico una sola carrera centraba la atención: la emblemática Western States 100 de California, una de las primeras pruebas de 100 millas estadounidenses, antiguamente disputada a caballo hasta que el jinete Gordon Ainsleigh, en 1973, decidió completarla a pie ante la cojera que padecía su equino.
La Western se celebra en las montañas nevadas del estado de California y ha tenido ganadores tan emblemáticos como Scott Jurek, Kilian Jornet o Timothy Olson, quien posee el actual record. En esta edición todas las miradas estaban puestas en un nombre propio: Jim Walmsley, el chulo, un tipo forjado sobre las pistas de atletismo que decidió dar el salto a las carreras de montaña y llegaba a la Western convencido de poder batir el récord de carrera. Y durante gran parte del recorrido nadie se atrevió a contradecirle. Jim empezó muy fuerte, a un ritmo constante que muchos no seríamos capaces ni de llevar sobre asfalto. Pasaban los kilómetros y se mantenía firme y seguro con su propia marcha. Con una camiseta agujereada como si acabara de salir de un tiroteo, Jim completaba los dos tercios del trazado con parciales de record.
Pero todo empezó a torcerse después de los 100 kilómetros, ya en compañía de su amigo y pacer Tim Freriks, ganador de Transvulcania 2017. Por motivos que no han trascendido, Walmsley decidía abandonar la carrera y renunciar a su intento de victoria y récord.
Entonces los focos pasaron a la figura de Ryan Sandes, un corredor que se maneja especialmente bien en pruebas de tan larga distancia, vencedor en España de Transgrancanaria y ganador del famoso circuito 4 Deserts. Ya había corrido Western States en el año 2012 logrando una meritoria segunda posición. Y este año no falló. Aprovechando la coyuntura, el sudafricano apretó en el último cuarto y se despegó de Alex Nichols (quien llegó a tenerle a menos de 5 minutos) para entrar victorioso en la meta con un tiempo de 16h 19:38. Sandes firmaba así uno de los mayores triunfos de su vida, la carrera con la que siempre soñó.
Al final, media hora después del sudafricano llegaba en segunda posición Alex Nichols (16h 48:22) y cerraba el podio masculino Mark Hammond (16h 52:57).
Este año, por segunda vez consecutiva, tomaba parte de la carrera el mallorquín Tofol Castanyer, quien llegó a estar en el top-5 durante algunos tramos del recorrido. Finalmente, Tofol entraba en meta en undécima posición con un tiempo de 18h 25:44.