La organización había advertido desde el principio que se trataba de una prueba exigente. Los test previos realizados al recorrido con el asesoramiento de la ultrafondista del equipo Salomon Nerea Martínez así lo atestiguaban. Aún así, la realidad superó las previsiones.
A las tres de la mañana del sábado 13 de septiembre se daba la salida a los pies de la Alhambra, desde Plaza Nueva, en pleno centro de Granada. Tras la subida a la fortaleza nazarí, todos los corredores tomaron dirección hacia la Dehesa del Generalife por un terreno roto, con continuas subidas y bajadas, siguiendo el curso del río Darro, hasta llegar al Cerro del Sol donde se encontraba el primer punto de control y avituallamiento. Aquí se formó ya un grupo en cabeza, que tuvo que enfilar una subida técnica hacia el Alto de Beas, con su posterior bajada, para llegar al segundo punto de control en la población de Quéntar. Aquí es donde comenzó ya a establecerse las posiciones de cabeza.
Marcel Batlle (Aurun Store) pasa en cabeza por este control. Les sigue, a poca distancia, un grupo formado por Tito Parra (Haglöfs Team), Ignacio Espigares y Ángel Mayor (Roller Master). En chicas, Mesi Arcos Zafra (Tuga Outdoor Team) pasa en primer lugar por este punto. Nerea Martínez (Salomon) pasa segunda a más de quince minutos.
Esta será la tónica durante toda la primera parte de la carrera, donde deben afrontar una espectacular subida hasta el Alto de los Jarales, descenso y subida al Alto del Calar, ya rondando los 2.000 metros de altitud. Desde este punto divisaran por primera vez toda el macizo de Sierra Nevada y tomarán conciencia de lo que verdaderamente les queda por superar. A partir de Güejar Sierra (km 43 de carrera) comienza la subida a Sierra Nevada. El granadino Ignacio Morón (Olimpo) que durante la primera parte de la carrera sufrió problemas de adaptación con la alimentación, comienza a recuperar posiciones y recortarle tiempo a Marcel Batlle, que continua destacado en solitario al igual que Mesi Arcos en relación a la clasificación femenina.
Al paso por el punto de control de Fuente Alta, a 2.000 metros de altitud, y con 65 kilómetros ya en la piernas, la fatiga y la altitud comienzan a hacer estragos. Aún queda la parte más dura del recorrido: recorrer 20 kilómetros a una media de 2.500 metros de altitud.En el punto de control de la Hoya de la Mora, a 2.500 metros de altitud, Marcel Batlle pasa primero seguido por Ignacio Morón a 8 minutos. La recuperación del granadino es espectacular y avanza con paso firme recortando minutos al corredor catalán.
Al paso por la cima de la prueba, en el punto de control del Veleta (3.100 m), Batlle corona en cabeza tras 9 horas y 27 minutos de carrera. Morón corona en segundo lugar a 5 minutos. La lucha en el descenso vertiginoso hacia la meta está servido. Un fuerte viento azota toda la zona lo que pone en dificultad incluso la verticalidad de los corredores, añadiendo un punto agónico a la lucha por el triunfo.
Finalmente Ignacio Morón logra adelantar a Marcel Batlle en la bajada y entra en meta vencedor con un tiempo de 10 horas y 12 minutos. Batlle logra entrar en segundo lugar a 4 minutos, tras 85 kilómetros de autentica dureza. La tercera posición es para Ángel Mayor García, que llegó a 26 minutos del vencedor.
En la categoría femenina, Mesi Arcos Zafra no tuvo rival durante toda la prueba. Marchó cómodamente en primera posición desde el inicio de la prueba. Nerea Martinez, la gran favorita en esta categoría, acusó mucho su participación el pasado fin de semana en la ultra de Madeira.
Prueba de la dureza del recorrido propuesto fue que sólo lograron finalizar 123 corredores la Ultra Sierra Nevada. En total fueron 475 los participantes inscritos en esta primera edición (el número máximo permitido por las limitaciones del Parque Nacional). 225 inscritos en la Ultra Sierra Nevada, 100 en la distancia de 65 km (USN65) y 150 en la distancia de 30 km (USN30). El vencedor de la USN65 fue José Torres en chicos y María del Mar López en chicas. En la USN30 Antonio Valles venció en la categoría masculina y Silvia Hidalgo en la categoría femenina.
Así se puso el punto y final a una primera edición de la Ultra Sierra Nevada, una prueba que ha nacido con vocación de permanencia. Un recorrido espectacular y duro, con variedad de paisajes, y el valor añadido de la altitud, que promete convertirse en referencia de los ultratrails en España.
