La gran esperada cita del concejo de Somiedo vuelve al calendario después de dos años de ausencia por la pandemia. Desafío Somiedo vuelve y lo hace con importantes novedades, la más importante de ellas es que, por primera vez, el evento asturiano se se desarrollará en fines de semana diferentes. Así los participantes de la maratón competirán el 21 de mayo; mientras que los corredores que opten por la ultra lo harán el 16 de julio.
“Tras dos años de mucho trabajo e incertidumbre parece que este año podremos volver a disfrutar de la carrera”, anuncian satisfechos Javi Pelaez y Gobitu, responsables de Aventuries y directores de la prueba. “Durante este tiempo el mejor regalo ha sido comprobar las ganas que tenían los corredores de regresar a nuestra tierra. Será muy emocionante tenerles de nuevo aquí y compartir con ellos momentos inolvidables”, concluyen.
Este mismo martes ha empezado el proceso de inscripciones para sus dos modalidades. La organización ofreció, tras la cancelación en 2020, dos alternativas a los que ya estaban inscritos: la devolución del coste del dorsal o la posibilidad de mantener la plaza para la siguiente edición. Así, los primeros que garantizarán su asistencia a la edición 2022 de Desafio Somido serán quienes ya contaban con la inscripción realizada en aquella ocasión. Para formalizar su participación tan solo deberán canjear el bono recibido en el plazo establecido. Una vez finalizado este periodo la organización realizará un recuento de las plazas vacantes que serán ofertadas al público en general, sin tener que recurrir al sorteo como en ediciones pasada.

Regreso a los orígenes en la Maratón
En 2022 los participantes de esta distancia volverán a recorrer el circuito original, aunque con ligeras variaciones: la prueba no partirá desde el Valle del Lago como era habitual, sino que lo hará desde la localidad de Pola de Somiedo, epicentro de este evento deportivo. Un cambio que afectará también a la distancia de la prueba, que pasará de 45 kilómetros a 50 kilómetros con un desnivel positivo de 2.926 metros. Este cambio se produce porque al trasladar la prueba al mes de mayo, el riesgo de nieve en la zona del Cornón es muy alto.
Con este cambio se recupera el protagonismo de los lagos del Valle y de Saliencia, así como de la crestería de los Bígaros. “Es cierto que muchos otros participantes echarán de menos Mumián o el Cornón, pero estamos seguros de que quedarán encantados con este cambio”, afirman los responsables de Aventuries.
La modalidad Ultra no presentará grandes cambios en su recorrido habitual. Así, el trazado volverá estar formado por 86 kilómetros y 5.386 metros de desnivel positivo llevando a los participantes a recorrer cotas por encima de los 2.000 metros de altitud. Entre los puntos emblemáticos del circuito no faltarán el puerto de la Farrapona o el paso por la cumbre del Cornón, techo de la carrera. Esta prueba sí se celebrará el 16 de julio.