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A PRUEBA | Riñonera Lazerdry Raidlight

Sentando en el banquillo a las mochilas

Daniel Sanabria.

Ultratest: Riñonera Lazerdry Raidlight
Ultratest: Riñonera Lazerdry Raidlight

Empezaré haciendo una confesión: no me gustan los cinturones de hidratación. Nunca he terminado de adaptarme a ellos, casi siempre se me terminan subiendo hasta el ombligo y sintiéndome como si corriera con un hula-hoop. Tenemos una relación complicada. Imagino que es culpa mía, a lo mejor estoy muy delgado, o no corro bien, me falta carne, o directamente no sé utilizarlos, vete a saber. El caso es que empecé a probar el Lazerdry de Raidlight sin esa clásica ilusión que uno tiene al estrenar material. Es más, tardé unas semanas en sacarlo de su bolsa desde que llegó a la redacción. Así estaba el tema... Pues a pesar de tener todas esas circunstancias en su contra, sorprendentemente el cinturón me ganó. Y pocas veces, muy pocas veces me convence un producto ante el que tengo prejuicios.

HIDRATACIÓN

La riñonera Lazerdry es una clásica riñonera de hidratación, de esas que nos permite dejar la mochila en casa si el entrenamiento que nos espera no es demasiado largo. Tiene capacidad para llevar 600 ml de líquido, repartidos en dos bidones de 300 mililitros cada uno que se insertan en la parte trasera del cinturón, uno a cada lado, en bolsillos elásticos muy accesibles. No hace falta quitarse el cinturón ni girarlo, se encuentran de manera muy intuitiva con la mano, sin necesidad de mirar. Como sugerencia, les pondría un pequeño cierre con cordel. A pesar de no tenerlo, los bidones no se salen, aguantan muy bien el rebote, incluso a ritmos altos y en descensos vertiginosos e irregulares. No se mueven un centímetro, aunque uno esté completamente lleno y el otro vacío. Otro punto a favor: al llevar los 600 mililitros repartidos en dos depósitos podemos cargar dos bebidas distintas, por ejemplo isotónica y agua.

AJUSTE

Lo que os comentaba al principio. Creo que es la primera vez en mi vida que he terminado un entrenamiento con el cinturón en el mismo lugar en el que lo empecé. En mi caso es algo paranormal. Creo que el secreto está en los eficientes sistemas de ajuste con ruedecillas de cable que nos permite ceñirnos la riñonera al milímetro. Su uso no puede ser más sencillo, aflojando y apretando a nuestro gusto, al instante y de manera sencilla. Tiene dos cierres de este tipo, uno a cada lado, encargados de buscarle el punto justo al cinturón, y el conjunto se completa con el cierre final, ubicado en la parte delantera con un tradicional cierre de clip.

Apuntar que al comprar la Lazerdry viene incluida una pequeña llave para arreglar las ruedecillas de cable en caso de que se enreden. Así, nosotros mismos podemos resetear el sistema sin necesidad de enviar el producto a los especialistas de la marca. Un detalle diferenciador de esos que han dado tanta fama y éxito a Raidlight.

CARGA

Además de los mencionados 600 mililitros para el líquido, dispone de dos minibolsillos delanteros elásticos para guardar accesorios muy pequeños (como las llaves, el MP3, unos auriculares, barritas o geles si no son muy voluminosos, etc) y de un gran bolsillo trasero con una capacidad aproximada de un palmo. Este ya da mucho más de sí, para el móvil, unos guantes, una gorra, un tubular, e incluso una chaquetilla de estas que se plegan hasta la mínima expresión. Personalmente le habría puesto un cierre de cremallera, no cuesta nada, aunque dificultaría un poco su facilidad de acceso mientras corremos, pero te quitarías cualquier mínima paranoia de que se saliera algo en medio de la carrera. Soy yo, que me gusta llevar los bolsillos cerrados. Aun sin la cremallera, la carga no se sale por la propia presión que ejerce la riñonera contra nuestro cuerpo.

Otro detalle que incorpora la Lazerdry son las gomillas traseras para sujetar los bastones. No la he utilizado ya que no acostumbro a correr con bastones, pero es un añadido para quienes sí están habituados y necesitan portarlos en los tramos donde no se utilizan.

También dispone de silbato integrado.

CONFORT

En una riñonera el confort está directamente relacionado con el ajuste. Y el ajuste ya os decía que es excelente. Poco más que añadir. Raidlight es uno de los mejores especialistas fabricando este tipo de productos de carga y para la Lazerdry han utilizado la misma tecnología que para su famosa colección de mochilas Responsiv. La riñonera es todo lo ligera que puede ser, con acabados de calidad, corte por láser, uniones sin costuras, tejido de rejilla resistente a enganchones y muy transpirable. En todos estos aspectos cumple con sobresaliente. Se ha fabricado en los propios laboratorios de Raidlight en el macizo de Chartreuse (Francia).

CONCLUSIÓN

Agradecido y emocionado, como diría la gran Lina Morgan, solo puedo decir que es la primera riñonera de hidratación que me ha convencido plenamente para correr en montaña. Siempre he preferido llevarme alguna de las mochilas ligeras que tengo, pero la Lazerdry las ha sentado en el banquillo a todas en algunos de mis últimos entrenamientos. En resumen: cómoda, ergonómica, de uso hipersencillo, con tejidos de calidad y, lo más importante, con un ajuste personalizado al milímetro. De solo 80 gramos de peso, está disponible en dos tallas (S-M y L-XL) y su PVP recomendado es de 69,95€.