Hace ya bastante que no escribo. Desde el mes de marzo, si no recuerdo mal. Ya se podrán ustedes imaginar que la “nueva normalidad” ha tenido efectos diversos en cada persona, y en mi caso, ante la ausencia de carreras, entrenos y objetivos deportivos más allá de los relacionados con la salud, ha propiciado el silencio. Más que nada porque hoy todos tenemos foros en los que alzar la voz. Pero no todas las voces son necesarias. Hago mío el adagio: “aporta o aparta”. Así, procuro tomar la palabra solo si creo que lo que voy a decir merece la pena, o mejora en algo la situación de partida.
Ya saben todos ustedes que recuperar el calendario de carreras llevará su tiempo. Esas aglomeraciones festivas y sudorosas de corredores con ganas de probarse, tendrán que esperar. Y las saborearemos con gusto cuando lleguen. Entretanto, no toda actividad ha cesado. Porque recordemos que el virus está ahí, con sus importantes secuelas a todos los niveles de nuestras vidas. Pero recordemos también que no es lo único contra lo que luchamos, y algunas cuestiones de suma importancia han pasado a un transitorio segundo plano, pero no las hemos de olvidar, porque, por desgracia, no es el segundo plano que adquiere el problema que se supera, sino quizá es el segundo plano de la preocupación que queda eclipsada por otra más momentáneamente acuciante. El plano de la importancia a veces lo deciden eventos externos. Pero, en definitiva, la lucha contra el cáncer sigue ahí, y el compromiso con esta lucha, de ningún modo puede perder vigor.
La Asociación Héroes Hasta la Médula, con Cristina Borrego y David Casado a la cabeza, no ha cejado en sus esfuerzos de visibilización para conseguir concienciar sobre la necesidad de donar médula. Auspicia y organiza eventos de toda índole, con grandes esfuerzos y compromiso por parte de muchas personas. Muy notables han sido las pruebas de natación en aguas abiertas, #Médula Swimming Costa Granadina, y la #MédulaTriathlon que ha sido organizada junto al Club de Triatlón Granada. Son retos deportivos para llegar a cuanta más gente mejor, y para, a través de la fiesta que supone el esfuerzo ímprobo, extender el mensaje: “Dona médula”, “Dona Sangre”. “Dona Vida”. Así de simple.
Héroes hasta la médula. Irene de Haro
Pero como nuestra revista es de trail, les comento que estos locos apasionados del deporte se han propuesto el no va más de las pruebas de carreras por montaña. Ya sabrán ustedes que en Granada se suele celebrar la mítica “Subida al Veleta”, que, por más señas, es una prueba que casi al alcanza los 50 kilómetros, desde Granada capital hasta el Veleta. El ascenso ha sido calificado como “la prueba más dura del mundo”. Puestos a rizar el rizo, seguro que a muchos organizadores se les ocurre la forma de dificultar y endurecer toda competición, y dado que el Veleta está ahí, el Club de Trail de Atarfe ha organizado junto a la Asociación Héroes Hasta la Médula una prueba que constará de 70 kilómetros y 4800 metros de ascenso. Bajo la denominación de #MédulaSkyChallenge, “De Atarfe al Mulhacén a pie”, se trata de un reto que tiene el visto bueno de la FEDME y que, bajo todas las condiciones que impone la “nueva normalidad”, invita a luchar contra la leucemia infantil.
El reto saldrá del pueblo granadino de Atarfe y pasará por numerosos puntos de la ciudad de Granada y tendrá como fin invitarnos a lo que de verdad nos convierte en héroes: salvar vidas a través de la donación, tanto de médula, como de sangre.
Les invito a echar un vistazo a toda la actividad de esta asociación a través de su página web, y, por supuesto, a través de su Facebook. Además, junto a la Universidad de Granada, se está generando una opción de mecenazgo, a favor del Aula de Investigación contra la Leucemia infantil “Héroes contra la Leucemia”. También pueden aportar su apoyo por esta vía.
Pero sobre todo, les vuelvo a invitar, como tantas otras veces, a convertirse en donantes, tanto de médula y de sangre, si es que todavía no lo son.