Crónicas

Sabor español en Chamonix: Manu Merillas y Sheila Avilés vencen en la OCC

Y segunda posición también para Antonio Martínez y Nuria Gil en la distancia de los 55 km

Fotos: José Miguel Muñoz Egea

6 minutos

Sheila Avilés ganadora OCC 2022

Las carreras de larga distancia son como las buenas películas de suspense: éste se tiene que mantener hasta el final. Es difícil hacer spoiler, porque todo puede cambiar antes de llegar a meta, y eso es lo que ha pasado en la edición 2022 de esta OCC, la "hermana pequeña" del UTMB® Mont Blanc que se ha celebrado hoy: en los 55 km de recorrido y 3.500 m de desnivel positivo, o mejor dicho, casi en los últimos 10 kilómetros de esos 55 han cambiado las tornas, la carrera ha entrado en su clímax, y han empezado a surgir las dudas acerca de qué corredores y corredoras iban a tener su final feliz.

También en una película hay actores de reparto, mal llamados secundarios, que logran robar el protagonismo a los principales, y de estos también ha habido hoy en la OCC, especialmente en la categoría masculina. Y vamos a empezar por relatar lo que ha sucedido con los hombres, partían como candidatos el polaco de apellido impronunciable y corredor de Salomon Bart Przedwojewski, ganador del Golden Trail Championship 2020 y que ha sido baja de última hora, el corredor eritreo de Scarpa Petro Mamu, vencedor en Giir de Mont este año y cuarto en Sierre Zinal, el británico Robbie Simpson, segundo el año pasado en esta distancia, y con posibilidades pero menos favoritos a la victoria, los españoles del equipo Scarpa Antonio Martínez y Manuel Merillas. Y decimos lo de menos favoritos, ya que el primero porque, a pesar de sus buenos resultados al inicio de temporada con la victoria en la distancia corta del Lavaredo Ultra Trail, no estaba en su mejor momento de forma, ya que hace un mes escaso pasó el Covid y le dejó un poco tocado; y el segundo porque el recorrido de la OCC a priori no era su terreno preferido, es decir, más técnico y alpino. Pero este año la organización cambió un poco el perfil rápido y corrible de la OCC de siempre, añadiendo un tramo nuevo más técnico entre el Chalet des Grands hasta el Col de Balme, unos 10 kilómetros a mitad de carrera, entre el km 23 y el km 33, un tramo "de montaña" de los que gustan al corredor leonés que al final le ha beneficiado. 

La primera oleada de participantes de la OCC salía a las 8:15 de la localidad de Orsières, situada en el suroeste del cantón en el Val d’Entremont. Un valle que ofrece paisajes únicos: los últimos espolones y agujas del flanco oriental del Mont-Blanc dibujando la frontera franco-suiza, glaciares suspendidos sobre las rocas pulidas, torrentes tempestuosos… El trazado de la OCC pasa por el corazón de este valle antes de llegar a Champex y la última y mágica parte del recorrido del UTMB® o de la CCC®. En los primeros kilómetyros encabezaba la prueba Petro Mamu, seguido por Robbie Simpson y el francés Arnaud Bovin, con Manu Merillas en quinta posición. En menos de 35 minutos los primeros corredores alcanzaban el primer avituallamiento en Champex-Lac, ritmos rápidos para las primeras rampas, con 500 metros de desnivel positivo a salvar en 7 km que ya “picaban”. Desde ahí se avecinaba el primer ascenso serio hasta subir a La Guiète, a 1.870 metros de altitud. Nuestros compañeros Depa y Teresa Sánchez, comentaristas en el la retransmisión en castellano de UTMBLive, se extrañaban de no ver a Antonio Martínez en los puestos de cabeza.

Manu Merillas ©Revista Trail Run by José Miguel Muñoz Egea. OCC 2022

Antes de alcanzar Trient, km 23, seguían en el mismo orden los tres -Mamu, Simpson y Bovin- a partir de aquí se iba ascendiendo al Chalet des Grands donde comenzaba el tramo técnico y rocoso hasta el Col de Balmes, el punto más alto del recorrido a 2.125 metros y el km 33. Y aquí empezaba el tramo de Manu Merillas, que con su característico estilo y llevando bastones (es que ha habido un interesante debate en el Live con el tema de los bastones: que si hay que llevarlos, que si no... ¡El caso es que a él le funcionan!) aprovechaba para colocarse líder de la prueba. A estas alturas Antonio Martínez, que siempre hace carreras de menos a más, se había colocado en octava posición e iba adelantando puestos casi volando por el sendero rocoso llegando al Col del Balme, pasando al francés Bovin y a Robbie Simpson en los apenas 3 kilómetros más técnicos. Por cierto, que a estas alturas de la carrera en el Live habíamos "perdido" las referencias del líder, desaparecía del mapa Petro Mamu. Manu Merillas había pasado primero por Balmes con un tiempo de 3:16:00. Desde el Col de Balmes a Argentières once kilómetros de rápida bajada en los que ya se empezaba a notar en las piernas de los corredores el esfuerzo del duro ascenso anterior y del tramo alpino. Y desde Argentières tenían que afrontar la última subida hasta La Flégère, salvando 279 metros de desnivel en 4,9 kilómetros, y aquí es donde se produce un cambio de guión: Anronio Martínez, "Antoñico", que seguía corriendo como un cohete en busca de su compatriota Manuel Merillas, lograba cogerle y rebasarle en el km 47. 

Gran gestión de la carrera por parte del corredor alicantino de Scarpa, que pasaba por la cumbre de La Flegére sacando un minuto dieciste segundos al leonés. Quedaban 7 kilómetros para la meta. Momentos de tensión. Suspense. Llegábamos al clímax de la película-carrera, pero quien creyera que ya se adivinaba un final claro con la victoria de Antonio Martínez después de esa gran remontada se equivocaba... Otro giro de guión, esta vez el factor de la suerte o la mala suerte, cambiaba la historia en poco tiempo: Antonio empieza a tener molestias en la pierna izquierda (ya se iba tocando el psoas izquierdo durante la subida a La Flegére), se ve obligado a parar en a bajada, momento en el que Merillas que sigue haciendo su carrera, le vuelve a pasar y a colocarse en primera posición ya hasta su entrada triunfal en la meta de la plaza de Chamonix, llena de gente, con un tiempo de 5:18:29. Sufriendo y cojo, Antonio Martínez seguía corriendo como podía para que no le alcanzara el británico Robbie Simpson que bajaba como un Sputnik en la última bajad. Y entra segundo con 5:21:01. Carrerón del de Onil y una pena su lesión en esos últimos 7 kilómetros. Pero lo que decíamos al principio, todo puede cambiar y no hay asegurado nada hasta el final. Y tercero entraba el británico Robbie Simpson. ¡Gran carrera y emocionante hasta el final!

Los tres primeros hombres OCC
 

 

Sheila Avilés, regreso a lo grande a la alta competición   

En cuanto a las chicas, la norteamericana Allie McLaughlin del equipo On Running salió a un ritmo rápido y constante, liderando la carrera hasta más de la mitad del recorrido. Por detrás y cerca de ella se fueron rotando los puestos de las corredoras que la perseguían. Segunda era la francesa Matilde Shagnes y tercera la atletadel equipo Asics Nuria Gil, que se estrenaba en la OCC y en larga distancia, ella misma nos contaba esta semana que los 55 km se le hacían muy largos, y no sabía muy bien cómo se iba  acomportar. La catalana no quería “lanzarse” mucho, pero se debió encontrar con buenas sensaciones desde elprincipio y no se bajó de la tercera posición durante casi toda la carrera. Sheila Avilés iba quinta. Allie parecía inmune al desgaste y seguía a un súper ritmo a mitad de carrera. Antes de llegar a Trient (km 23) otra norteamericana iba a robar plano en los primeros puestos: Kimber Mattox, que apareció como una exhalación en segunda posición, adelantaba a Nuria y Sheila que ya corrían juntas. Otras tres españolas corrían en los primeros 20 puestos antes del tramo técnico: Julia Fonts (11º) Mireia Pons (14º), Anna Comet (17) y Mónica Vives cerrando ese top 20. En el caso de las féminas el giro de guión se iba a producir también en el último tramo.  Allie McLaughlin, que parecía sobrada y que iba en el top 30 de la clasificación general, paga cara la subida a La Flegére y se desfonda. Sheila Avilés que viene muy fuerte, como Antonio Martínez haciendo una carrera de menos a más, la adelanta y se pone primera hasta llegar a la meta en Chamonix. La atleta de adidas se marca un carrerón en su regreso a la alta competición después de haber pasado muy malas temporadas por lesiones y enfermedad de Lyme. La alegría la desborda al pasar bajo el arco de meta situado en el corazón de Chamonix con un tiempo de 6:10:16. Y doble ración de felicidad porque segunda, a poco más de seis minutos llega su amiga Nuria Gil que también había adelantado a Allie McLauglin (a la postre sería quinta). Tercera la norteamerica Dani Moreno. 

El podium femenino 

 

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