Esta mañana se ha celebrado la tercera prueba de la semana grande del UTMB, la ‘corta’. Hablamos de la OCC (Orsières, Champex, Chamonix) de 55 kilómetros y 3.500 metros de desnivel positivo, una carrera que se mantiene al margen de la orgía de ultradistancia que se vive en el macizo del Mont-Blanc cada mes de agosto. Aunque no por ello deja de ser dura y desafiante con un trazado que ha llevado a los participantes por el valle d’Entremont, un rincón que guarda los últimos espolones y agujas del flanco oriental del Mont-Blanc, dibujando ya la frontera orográfica entre Francia y Suiza, para luego enlazar con el camino del UTMB hasta la llegada a meta en Chamonix.
A las 8:15 de la mañana tomaron la salida 1.200 corredores desde Orsières, comuna suiza perteneciente al cantón del Valais. Y ya desde el principio se intuía una carrera rápida entre los atletas favoritos a la victoria. El triunfo terminó siendo una competición entre dos, un pulso entre Thibaut Baronian y Marc Lauenstein que se decidió en favor del suizo. Con una gran trayectoria como atleta de orientación, un prestigioso triunfo en Sierre Zinal y dos inolvidables podios en Zegama, Lauenstein ha dejado esta vez su sello en el Mont-Blanc. Se mantuvo en todo momento en las posiciones delanteras, siempre pendiente del francés, con quien iba a jugarse el título en el último cuarto de carrera. Fue en el mítico ascenso a la Flégère donde Lauenstein abriría hueco con Baronian para después vaciarse en el vertiginoso descenso a Chamonix y llegar a meta victorioso con un tiempo de 5h 19:34. Por su parte, Thibaut Baronian registraba un tiempo de 5h 23:58.
Al margen de ambos, se celebró la otra OCC. Una competición por el tercer escalón del podio que perteneció durante gran parte del recorrido al francés Thomas Angeli. Tras él, y ganando posiciones según se sucedían los kilómetros llegaba el trío de españoles, formado por Santi Mezquita, Iván Camps y Mario Olmedo. En el ascenso a la Flégère Santi se descolgaba y perdía varios puestos en la clasificación mientras que Iván y Mario buscaban ansiosos la figura de Angeli, que parecía perder fuelle.
Los dos jóvenes del equipo BUFF, que habían corrido juntos durante más de 50 kilómetros, se vaciaron en el descenso final a Chamonix y fue Iván Camps quien se hizo finalmente con ese codiciado bronce, mejorando el quinto puesto que logró al el año pasado. Su crono: 5h 27:14. En meta esperó a su amigo Mario, cuarto (5h 28:45), y juntos disfrutaron de un emotivo momento. Finalmente Santi Mezquita, que rodó dentro del top-5 durante buena parte del circuito, fue undécimo con un tiempo de 5h 38:36 y ganador en categoría veteranos V1.
