Llevamos muchas semanas que han sido muy difíciles en todos los sentidos, y es muy posible que por distintas y muy variadas razones hayas hecho un parón en lo que a entrenamientos se refiere. La mayoría de la ciudadanía no dispone de un pequeño jardín, de una maquina de correr o tan siquiera de unas escaleras en las que poder hacer un poco de ejercicio por lo que han optado con resignación a hacer el descanso que se suele hacer de temporada esperando que con el paso de las semanas podamos recobrar poco a poco la libertad necesaria para poder entrenar con cierta normalidad.
Ese escenario está cada día más cerca, y es justo ahora el momento de comenzar a activar tanto nuestro cuerpo como nuestro cardio, con el fin de que cuando llegue ese día no comencemos totalmente de cero.
Es importante e imprescindible reservar al menos una hora diaria para esta tarea, dedicándola a ejercicios de CORE, circuitos de pesas (hay un montón de útiles que podemos usar a tal efecto) y trabajar algo el cardio con ejercicios de trabajo cardiovascular con tábatas (trabajo intensos de 4' marcando 20" 100% y 10" descanso) intercalando ejercicios tales con saltos a comba, skipping, lunge o sentadillas.
También es vital para los corredores de montaña el realizar ejercicios para fortalecer los talones, y los tendones del pie (trabajo preventivo para fascitis plantar, ya que fortaleceremos la planta del pie y toda la cadena muscular que interviene en la carrera a pie), ya que son las partes del cuerpo que más sufren practicando trail running, para fortalecerlos podemos hacer ejercicios de elevación de talones, subir y bajar un peldaño o una mesita no demasiado elevada, y realizar buenas sesiones de estiramientos que garanticen que cuando podamos correr nuestros músculos tendrán la fuerza, la flexibilidad y la resistencia necesarias para comenzar a entrenar con más garantías y mínimas molestias.