Entramos en unos meses donde hay muchas carreras de montaña, pero también… mucho calor! No hablamos de tener que abandonar el entrenamiento durante julio y agosto, pero sí de extremar las precauciones y cambiar algunos hábitos. Te damos unas claves para que puedas seguir rindiendo igual en la montaña en verano sin poner en peligro tu salud.
• Aprovecha para correr a primera hora de la mañana o a última de la noche, pero preferiblemente por la mañana, que hay menos riesgo de sufrir altas temperaturas y además contamos con buena luz. Por supuesto, evita las horas centrales del día, entre las 12:00 y las 17:00 de la tarde.
• Elige caminos y rutas que conozcas bien y que te proporcionen zonas de sombra en la mayor parte del recorrido. Siempre alivia más correr en bosques y zonas con vegetación que nos protejan del sol.
• Refresca con agua fría tu pañuelo o gorra. Aprovecha cualquier arroyo, fuente o río del camino para mojar tu buff y ponértelo en la cabeza empapado.
• Lleva ropa clara y transpirable. Gracias a las marcas fabricantes contamos con multitud de prendas en el mercado actual para ir equipados con tecnologías de última generación que nos ayudan a transpirar y mantenernos secos. Aprovéchalas.
• No hagas tiradas excesivamente largas los días más calurosos. Fíjate en el tiempo que va a hacer antes de programar tu entrenamiento semanal y elige el día de menos calor para hacer los rodajes más largos.
• Combina la montaña con la piscina y aprovéchate de los beneficios que también tiene para el trailrunner la natación. Una piscina es un mundo de posibilidades para un corredor y nos permite hacer multitud de ejercicios de fuerza.