Diversos estudios llevados a cabo demuestran que una fase de tapering bien diseñada puede mejorar el rendimiento de un 6% a un 20%. Cada corredor debedescubrir qué tipo de tapering se adapta mejor a sus características y la que favorece el aumento del rendimiento, que es el fin de esta estrategia. Para ello, puedes poner en práctica diferentes rutinas en competiciones anteriores a la principal. De este modo irás limando detalles: ajustando tu kilometraje y desnivel, buscando la sensación de puesta a punto y descansando más de lo habitual para sentirte ligero.
En cualquier caso, un tapering realizado correctamente te aportará estos 8 grandes beneficios:
• Mejora el rendimiento general del corredor.
• Mejora la potencia muscular.
• Aumenta los depósitos energéticos.
• Repara y recupera los tejidos que participan en el entrenamiento.
• Afina el sistema nervioso para que el trabajo sea eficiente y económico.
• Elimina el riesgo de sobreentrenamiento.
• Refresca la mente.
• Aumenta la motivación de cara a la competición.