A muchos corredores les gusta tomarse el día libre después de un entrenamiento o competición exigente, pero hay ciertos tendones que podrían endurecerse por ese gran esfuerzo y para evitarlo, nada mejor que unos suaves sencillos ejercicios de estiramiento que nos ayudarán a recuperarnos mejor. Estos cinco prácticos ejercicios deben realizarse de manera dinámica pero a baja intensidad, para liberar tensión de nuestro cuerpo, y haciendo varias repeticiones cortas.
1. Siéntate de cuclillas a continuación extiende tu pierna derecha, de tal modo que quedes sentado sobre el talón de tu pierna izquierda. Manteniendo el tronco recto, guarda la posición durante unos segundos y después cambia de pierna y repite el ejercicio.
2. Encuentra un escalónlo suficientementealto como para poder dejar colgando fuera algo más de la mitad de la superficie del pie, mientras que el resto permanece apoyado sobre el escalón. Baja esa parte del pie suavemente hasta que notes el gemelo estirando. Guarda la posición unos segundos y repite con la otra pierna.
3. Cruza tu tobillo derecho por encima de la rodilla izquierda y apóyaloen tu pierna. Baja ligeramente y con suavidad, como si fueses a sentarte en una silla imaginaria. Si pierdes el equilibrio, busca algún apoyo. Mantén la posición durante unos segundos y repite con la otra pierna.
4. A pata coja sobre tu pierna derecha, lleva tu talón izquierdo por detrás de losglúteos y agárralo con la mano derecha suavemente levanta el pie hacia el coxis y manteniendo el tronco recto aguanta la posición unos segundos. Después, repite el ejercicio con la pierna contraria.
5. De pie, separa los pies hasta que estén a la altura de los hombros y junta tus manos por detrás del cuello mientras aprietas los omóplatos. Extiende los codos hacia los lados y abre el pecho lo máximo que puedas.