Crónicas

Ludovic Pommeret y Courtney Dauwalter batén el record de la Hardrock 100

A sus 48 años ha logrado una grandísima victoria batiendo el tiempo que había establecido Kilian

Antonio Madriñan

3 minutos

Ludovic Pommeret bate el récord de la HR100 ©iRunFar

A poco más de una semana de cumplir 49 años, el atleta francés Ludovic Pommeret es historia viva de la Hardrock 100, una de las pruebas de ultramaratón más emblemáticas del mundo. No solo se proclamó campeón, sino que también batió el récord establecido por Kilian Jornet.

La Hardrock 100 no es solo una carrera; es una celebración de la historia y la resistencia humana. Nació como homenaje a los mineros que construyeron los caminos por los que hoy corren los atletas. Desde su inicio en 1992, ha sido cancelada en cuatro ocasiones: en 1995 por acumulación de nieve, en 2002 debido a incendios, en 2019 por riesgo de avalancha y en 2020 por la pandemia.

La clásica carrera de 100 millas americana, que comienza y termina en Silverton, Colorado, atrajo a un grupo de destacados especialistas en la distancia, incluyendo a Jason Schlarb, Diego Pazos y François D'Haene. Desde el principio, Ludovic Pommeret dejó claras sus intenciones. En la milla 7, marchaba como líder junto a Pazos y Schlarb, y para la milla 18, había comenzado a distanciarse significativamente de sus perseguidores, aventajando al segundo corredor en más de 4 minutos.

En la milla 87, Pommeret ya rozaba el récord de la prueba con sus manos, aventajando a Schlarb en más de dos horas. Finalmente, cruzó la línea de meta en un tiempo histórico de 21 horas, 33 minutos y 8 segundos, superando el registro de Kilian Jornet por tres minutos y doce segundos. Diego Pazos llegó en segundo lugar con un tiempo de 24 horas, 39 minutos y 36 segundos, mientras que Jason Schlarb cerró el podio con un crono de 24:48:18.

François D’Haene que durante mucho tiempo marchó en segunda posición se vio abocado al abandono. 

En categoría femenina, Courtney Dauwalter demostró una vez más esa fuerza imparable y dominadora en este tipo de carreras.  Pese a los esfuerzos de Katharina Hartmuth y Camille Bruyas por mantenerse a su ritmo, Dauwalter se distanció rápidamente de ambas corredoras. 

Courtney Dauwalter entrando a la meta de la HR100 ©iRunFar

En la milla 44, ya aventajaba a Bruyas en 6 minutos, y esa ventaja continuó creciendo hasta superar una hora en Sherman Station. 

En la milla 87, Dauwalter casi aseguraba su victoria con una ligera ventaja sobre su propio mejor tiempo. Y ese tiempo llegó. 26 horas 11 minutos 47 segundos. Una victoria impresionante y un récord excepcional que la llevaron a la cuarta posición de la clasificación general. 

Por su parte Camille Bruyas llegaba a meta en segunda posición con un crono de 29:28:18. La atleta se Salomon no aflojó, realizó una carrera consistente llevándose una valiosa segunda plaza. 
 

Katharina Hartmuth era la encargada de cerrar el podio. Lo hacía con un crono de 30 horas 29 minutos 17 segundos. 

El corredor español, José Samaniego,  también es uno de los finishers de la titánica #HR100 en un tiempo de 44 horas 39 minutos 24 segundos. Una auténtica barbaridad y un sueño cumplido para el y sus “pacer”, entre los destaca Brianna embajadora del equipo NNormal.


Algunas curiosidades

El recorrido de la Hardrock 100 es un desafío monumental, disputado por encima de los 2.800 metros y alcanzando alturas de hasta 4.281 metros. Los corredores enfrentan 13 collados de 3.700 metros a lo largo de las 100 millas. Cada año, el recorrido se realiza en un sentido diferente, y se dice que para ser un auténtico finisher de la Hardrock hay que completarla en ambas direcciones.

El proceso de inscripción es riguroso. Aunque más de 5.000 personas se pre-inscriben cada año, solo 140 dorsales están disponibles, y los afortunados son seleccionados mediante un sorteo en febrero. Los aspirantes deben haber completado una prueba de 100 millas en los últimos tres años para ser elegibles.

Uno de los momentos más icónicos de la Hardrock es el “beso al Hardrock”, una roca de origen minero con la imagen de un muflón, que simboliza la culminación de la carrera. Además, los atletas mayores de 60 años pueden hacer el recorrido acompañados de una liebre, y en la milla 31, los corredores mantienen la tradición de tomarse un pequeño chupito de tequila al pasar por la estación de Virginia.

Todas las imágenes son de https://www.irunfar.com/