El pasado fin de semana Laura Sola se coronaba campeona de España de Ultradistancia FEDME en el Ultra Valle de Tena, un día que jamás olvidará. Salió con mucho respeto a una distancia que jamás había afrontado y dominó la carrera por completo hasta llegar en primera posición a Panticosa.
¿Qué te vino a la cabeza en ese momento?
Pensé que eso no me podía estar pasando a mi, que no podía ser. Había conseguido mi reto y no solo eso... llegar la primera. ¡Todavía no me lo puedo creer! Fue un momento desbordante, con todos los amigos allí, no sé explicarlo..., una emoción increíble, no se me va a olvidar.
Pues eres la campeona de España de Ultradistancia FEDME.
Es la guinda del pastel, una cosa que pasa una vez en la vida..., íncreíble.
¿Cuál ha sido el secreto de esta victoria?
Un recorrido que me encanta y un terreno en el que me encuentro muy a gusto, tal vez en un trazado de otro tipo el resultado no habría sido el mismo. Haberme centrado en disfrutar, en vivirlo para mí y olvidarme del puesto me permitió no sentir ninguna presión y seguir a mi ritmo.
Este triunfo llega tras un parón competitivo… Parece que la forma no se pierde, ¿verdad?
Este año el cuerpo me pedía hacerlo distinto, estaba pendiente de una oposición y más cosas personales que quería atender. Además, aunque el año pasado fue para mí increíble y disfruté muchísimo, necesitaba una desconexión de la competición, hacer cosas sin esa pequeña presión que nos ponemos al competir. Mi idea era ir sobre la marcha, no hacer carreras porque toca o porque ya estoy dentro de un circuito, escucharme y lo que haga hacerlo porque me muero de ganas.
Y era la carrera más larga que habías hecho hasta entonces.
Sí, totalmente. Había hecho dos años la 4K, pero la ultra no. La 8K siempre me llamó la atención, y este año me decidí a probar. Este verano no tener carreras me ha permitido tener los fines de semana libres para hacer más días lo que hacía antes de competir: ir al monte sin más. Ha sido un verano de planes muy chulos y he hecho recorridos preciosos que sin darme cuenta me han ido preparando para afrontar este recorrido.
¿Qué pensabas antes de salir en carrera?
Me sentía muy pardilla, con mucha incertidumbre de si podría con esa distancia y con los nervios a tope, pensaba que por fin había llegado el día y que el objetivo, sin duda, era disfrutar de cada paso.
Y entonces te ves primera y tirando del grupo. Por las fotos que hemos visto lo has debido disfrutar de lo lindo...
Los primeros kilómetros fuimos un grupo de cuatro juntas, yo sólo conocía a Sofía y no me atrevía a tirar para adelante. Estaba con la mente todo el rato pensando que si me pasaba de ritmo igual no llegaba y que no tenía experiencia. Por fin Sofía cambió el ritmo y se puso primera. Me fui con ella y vimos juntas el amanecer llegando al primer collado, fue un momento mágico y un placer compartirlo con ella, a la que conozco de hace años por el esquí de montaña, y al empezar la bajada ya nos separamos. Realmente Sofía fue más valiente que yo, tengo mucho que aprender y le agradezco que su valentía me hiciera dar el paso. A partir de aquí me repetí mil veces que me olvidara del puesto, si llegaba, bienvenido, pero no era el objetivo, igual no vuelvo a hacer algo así y lo que quería era vivir el día disfrutando. Un buen puesto deja muy buen sabor unos días, pero luego se olvida, en cambio una experiencia tan buena, llegues como llegues en la clasificación, no la olvidas nunca. Con eso iba en la cabeza.
¿Qué te queda este año?
Tal vez Leyre Trail que es una carrera muy bonita y emotiva aquí en Navarra y por compartir con el equipo haré el Campeonato de España por equipos en Galicia.