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Agujetas, dolores ‘a posteriori’

¿Qué remedios funcionan?

Redacción Trail Run

Agujetas, dolores ‘a posteriori’
Agujetas, dolores ‘a posteriori’

Seguro que en alguna ocasión, tú también has sido “víctima” de las agujetas, esos dolores invisibles que tenemos en los músculos y que aparecen especialmente cuando hacemos deporte a una alta intensidad después de estar un tiempo parados. O bien cuando el esfuerzo que exigimos a nuestros músculos es excesivo para su nivel de preparación. Las agujetas no son más que pequeñas roturas en microfibras que se producen cuando el ejercicio físico realizado es demasiado exigente (bien en intensidad o en duración) para nuestro entrenamiento. Nuestro organismo actúa de esta manera como “acto de protesta”. Aunque la aparición de agujetas también puede estar asociado a una acumulación de ácido láctico en las fibras musculares.

Desde un punto de vista menos coloquial y más médico, podemos decir que las agujetas son el producto de una reacción inflamatoria en respuesta a micro lesiones musculares y tendinosas producidas durante el ejercicio en músculos que no están adaptados a esa exigencia. Por ejemplo, si estamos acostumbrados a correr distancias de 20-25 kilómetros en la montaña y un día hacemos un maratón, es muy probable que nos levantemos con agujetas al día siguiente, ya que estamos hablando de unas molestias de aparición tardía.

La duración de las agujetas puede variar en función de la intensidad del ejercicio y el número de microfibras dañadas, aunque normalmente duran de tres a cuatro días. Una vez han aparecido, ¿cómo podemos solucionarlo? El clásico remedio casero que siempre ha estado sobre la mesa ha sido el vaso de agua con azúcar, aunque diversos estudios han demostrado que esta solución no es eficiente. Entre los remedios que se han demostrado que sí resultan más eficientes están los siguientes: una correcta hidratación, sesiones suaves de estiramientos, ejercicio aeróbicos de intensidad moderada (correr a ritmo lento, nadar, salir en bicicleta, etc.), aplicación de geles o pomadas antiinflamatorias, masajes suaves y un descanso adecuado. La mayoría de corredores con agujetas no vuelven a la normalidad muscular completa hasta que no pasa un periodo de cinco a siete días.